Bizcocho de las Carmelitas Descalzas de Sevilla

Es una muy antigua manera de realizar un bizcocho y conocido era que la persona que te entregaba el vaso con la masa madre te deseaba suerte y salud.
Se requieren 10 días para su elaboración sin usar batidora y otros utensilios modernos.

La tradición dice que la masa te la tienen que dar y empezar la elaboración en jueves, para que el bizcocho esté listo el sábado de la siguiente semana.


La masa no se guarda en la nevera.
Jueves: Se vierte el contenido del vaso entregado en un recipiente mayor, se añade un vaso de azúcar, un vaso de harina. No se mezcla.

Viernes: Se mezcla con una cuchara.

Sábado: No se toca.
Domingo: No se toca.
Lunes: Se añade un vaso de azúcar, un vaso de harina y un vaso de leche, no se mezcla.

Martes: Se mezcla todo bien con una cuchara.

Miércoles: No se toca.
Jueves: No se toca.
Viernes: No se toca.
Sábado: La masa habrá formado una costra dura, se mezcla bien y se apartan tres vasos de la masa madre, que se entregaran a tres personas a las que deseas salud y suerte.

Al resto de la masa se le añade:
- un vaso de harina
- un vaso de azúcar
- una manzana trozeada
- un vaso de aceite
- un vaso de leche
- un vaso de almendras molidas
- un sobre de levadura
- dos huevos enteros
- una pizca de canela
- una ralladura de naranja

Mezclar bien con una cuchara y hornear a 180ºC durante unos 45 minutos.

Buenísimo! Veréis que la paciencia tiene su recompensa...